Para comenzar, os doy la bienvenida formalmente a mi proyecto. Oneball es, en pocas palabras, mi altavoz o rincón en el cual este apasionado del deporte, más en concreto del fútbol, puede opinar y compartir sus ideas sobre el deporte más seguido y global que existe.
Aviso! En este espacio no se pretende exponer debates sobre jugadores de fútbol y si son mejores o peores unos u otros, no! Y tampoco hablaré tácticamente de equipos o haré análisis de las plantillas. Prefiero avisar y ser honesto con vosotros y vosotras desde el principio, por lo que si buscáis este tipo de reflexión os recomiendo acudir a otras webs, blogs, revistas, etc...
Ahora bien, en este blog quiero dar a conocer mis ideales, ya que creo que el fútbol es un instrumento poderosísimo que puede ayudar a cambiar el mundo. Es un deporte que mueve pasiones y moviliza masas, y eso bien canalizado puede ser un motor muy potente para hacer de esta sociedad un lugar mejor. Por ello, se intentará exponer ideas o propuestas de gestión propias, así como acciones o iniciativas ajenas y que ya se han llevado a cabo por clubes o entidades deportivas, que tengan como fin utilizar el deporte como medio para mejorar este mundo del cual somos parte.
Reconozco que soy un idealista y es muy probable que muchas de las ideas que exponga sean contrarias a los ideales de otras personas que piensen diferente de mí, pero siempre he creído que el fútbol no es solo un deporte de 11 contra 11 que juegan a dar patadas a un balón. Para mí es un reflejo de un ideal de sociedad, ya que durante un partido de fútbol solamente hay personas que JUEGAN, sin importar el color de piel, la altura, la nacionalidad, la edad o el estatus social mientras el balón está en juego. Por lo que creo, sin duda, y en mi más absoluta opinión, que es el entorno quién “corrompe” esta paz o ideal.
El machismo, la homofobia, el racismo, la violencia, la codicia de los clubs y de los propietarios de éstos, etc... en demasiadas ocasiones son lacras que con un balón de fútbol por medio no importan, pero cuando éste desaparece, de golpe, emergen, y en consecuencia, de forma errónea, se considera al fútbol como principal causante, haciendo que el balón se manche. Y es eso, ¡el balón jamás se mancha! Son las personas, la sociedad, las que corrompen este deporte, no al revés. Y es eso lo que pretendo demostrar y hacer ver con Oneball.
El fútbol como deporte no solo sirve para fomentar buenos hábitos de salud mediante la práctica del deporte, también es una gran herramienta de integración social y transmisión de valores y principios. Además, y esta es opinión muy personal que intentaré argumentar y desarrollar en este espacio, puede ser una potente herramienta para fomentar la cultura. Revistas como Panenka, de la cual soy muy seguidor, son reflejo de ello. (spolier!, haré mención varias veces a ésta).
Creo fervientemente en que el mundo puede ser cambiado mediante pequeñas acciones y que un grano de arena también hace playa. Por ello, este espacio pienso utilizarlo como altavoz de mis ideas y de lo que, en mi opinión, el fútbol puede hacer para cambiar la sociedad en la que vivimos. Y, de paso, intentar hacer cambiar la idea, equívoca, de que el deporte del balompié es uno de los culpables de los muchos problemas sociales que son parte de nuestro día a día y que se acaba desprestigiando un deporte que tanto amo.
Nuevamente, os doy la bienvenida a Oneball, donde el balón nunca se mancha.